Hagamos algo diferente, algo que nadie más esté haciendo. Rompamos las reglas, arriesguémonos a ser revolucionarios: vamos a contar historias maravillosas llenas de amor. Porque cualquiera es capaz de contar tragedias, de crear drama.
Vamos a arriesgarnos a ser felices.
Mientras escribo esto me encuentro pensando en ti y en mi, en como nos vemos viviendo el mañana, ese mañana que es un futuro muy cercano. Estoy pensando en ti y en mi siendo felices, sintiendo esa felicidad que es duradera, constante, tenaz.
Hoy me arriesgo a decirte que te amo, a decirte que esto que te escribo es un compromiso de mantenerme firme en la lucha para conseguir lo que queremos. No te prometo que no voy a caer, ni te estoy diciendo que no vendrán días duro, tristes o cansados. Te estoy diciendo que me mantendré en la lucha constante, que haré lo necesario para que cuando estemos cansados, cabreados o hartos nos lamzemos a buscar la forma de arreglarlo. Para comprendernos.
Esta es la carta con la que me comprometo con el universo entero a hacer lo necesario para armar ese futuro que deseo para ambos. Este es el texto con el doy el primer paso definitivo para la campaña de que ambos seamos felices. Y lo lograré, lo lograremos. Porque te amo.